Queridos Mauro y Gilberto:
Mi nombre es Martín, soy de Rosario y quiero aportar algo sobre la famosa polémica de la que se habla. Me gusta Michael Phelps, aunque no soy un fanático ciego de él. Soy espaldista y por ende sigo más a espaldistas que a midlistas.
En cuanto a la famosa carrera ganada, después de los múltiples ángulos en los que mostraron la llegada, hay uno que muestra claramente que fue Phelps quien ganó esa carrera. Si bien, como Gilberto bien dice, Cavic “tocó” primero la pared también es cierto que “acarició” la pared cuando Phelps hizo lo que hay que hacer: la pulverizó. Las placas que toman los tiempos no son sensibles al TACTO sino a la PRESIÓN. Bueno, así se debe tocar en la llegada. Si se fijan en la foto del blog, Cavic quiebra las muñecas después de una eterna “estirada” cosa que Phelps hace muchas veces también y que fue moneda corriente en Beijing. No puedo entender como nadadores híper profesionales estiran en el último metro de carrera. Bueno, esta vez Phelps lo consideró, lo aplicó y ganó. Matt Biondi perdió en los 100 mariposa en Seúl 88 contra Pablo Morales por esa misma diferencia y porque también estiró en el final. Resultados: Pablo Morales oro (53”00), Biondi, plata (53”01) En cuanto a los patrocinadores es la primera vez que escucho que Omega lo patrocina a Phelps, pero aunque así fuere, está el Comité Olímpico Internacional y la FINA de por medio para sobornar. ¿No les parece mucho? Por otro lado Speedo le había prometido a Phelps pagarle un millón de dólares si ganaba las 8 medallas. La oferta ya se la había hecho en Atenas y Phelps no lo logró. Si de sobornar se tratase no creo que Speedo esté muy felíz de deshacerse de “un palo” verde. Sin duda que ganarán más de lo que le ofrecen pero nadie quiere tirar todo ese dinero en estas épocas. Además que no he leído ninguna polémica o indicios de desconfianza en diarios internacionales por lo que parece que las pruebas fueron claras.
Además para parar los cronómetros (algo que no es manual pues son sensores automáticos) 0,01 segs antes que Cavic se debe tener una precisión inhumana y saber exactamente cuando Cavic va a tocar y contar con que Phelps va a llegar ahí nomás, cerquita. A mí no me queda la más mínima duda que Phelps ganó. Repito, miren las manos en la foto y lo van a comprobar. Todo lo demás puede ser cierto, NBC y los estadounidenses manteniendo a su audiencia despierta por el rating pero creo que una cosa no quita la otra. Phelps tuvo la suerte que todo campeón tiene que tener por fuera del talento. A Cavic le tocará reflexionar y aprender que la pared es tu enemigo número uno y por lo tanto no se lo “acaricia” se lo demuele. Gracias por compartir sus opiniones y ¡¡aguante la natación!!
Martín Vaccaro
