Cuando aún no se cumplió un mes del asesinato del palista rosarino Ariel Pasquini, otro deportista argentino fue víctima de la inseguridad, un escollo que se suma a la falta de apoyo e infraesctructura para los atletas de alto rendimiento. Quince minutos después de las siete de la mañana de ayer domingo, en la esquina de las calles Villarino y Teniente Ibáñez de la ciudad rionegrina de Cipoletti, el joven Ariel Morelli, integrante de la selección nacional de natación de sordos Los Pulpos, sufrió graves lesiones a raíz de los golpes que le dieron los tres ladrones que se llevaron su dinero; billetera y pertenencias personales sin que él opusiera resistencia alguna y a pesar de explicarles su condición de hipoacúsico.
Con veintitrés años, Morelli cuenta con una trayectoria deportiva que incluye tres medallas de plata y seis de bronce en los Juegos Deportivos Panamericanos de Sordos disputados en Venezuela, además de múltiples récords nacionales tanto en pileta como en aguas abiertas que le valieron el premio CADES de Plata y Oro al ser elegido como el mejor nadador y deportista sordo de 2006. El fin de semana pasado compitió en el maratón acuático del Lago Los Reyunos de la localidad mendocina de San Rafael donde obtuvo el segundo puesto al bracer los dos kilómetros en 22m59s.
Fuente: El Depornauta