Primera Competencia - escrito por Miguel Corsi - Saturday, 19 de April de 2008
Ayer competí por primera vez en un mundial de natación master y, a decir verdad, fue una experiencia maravillosa.
El Challenge Stadium es uno de los complejos deportivos más famosos de Australia. Es un centro deportivo de alto rendimiento, un lugar abierto a la comunidad para realizar deportes y también un espacio donde se disputan diferentes competencias nacionales e internacionales. Sumado a lo anterior, se realizan semanalmente varios espectáculos culturales. Todavía no lo recorrí en su totalidad pero ya vi las 3 piletas de 50 metros para competencias y entrada en calor, la pileta de saltos y nado sincronizado y la pileta donde se están realizando los partidos de waterpolo. Tienen dos minibares, una sala con 6 computadoras con acceso a Internet, un gimnasio para gimnasia deportiva, canchas de fútbol y rugby, etc. etc.
En este Campeonato Mundial se aplican las reglas de la FINA (Federación Internacional de Natacion Amateur) no solo en lo que respecta a los estilos (toques reglamentarios, sin partida en falso, etc) sino también en lo referido al llamado previo a la competencia. Hay que presentarse a una de las mesas de control para lo que se denomina en ingles “marshaling area” , algo así como la zona de organización o prelargada. En determinado momento están los nadadores compitiendo, los de la serie siguiente, sentados detrás del cubo de partida, los de la otra serie sentados en la cabecera opuesta dentro del natatorio y además los de la otra-otra serie sentados en la mencionada “marshaling area”
Debuté con los 800 libres y, si bien no mejoré mi marca por un par de segundos, el puesto 24 en el resultado final me dejó más que satisfecho. Cometí el error táctico de ser demasiado cauteloso en los primeros 300 metros: por evitar forzar el ritmo y tratar de producir poco acido láctico al comienzo de la prueba, el grueso de los competidores se me alejó mucho. Al dar la vuelta en los 300 metros levanté la cabeza y me fijé en el parcial que aparece automáticamente en el tablero electrónico. Cuando me di cuenta que estaba detrás del tiempo que me había fijado levanté el ritmo, pero esto no alcanzó. Paciencia.
Hoy sábado no tengo ninguna prueba, quizás a la tarde vaya a nadar para recuperarme para lo 400 combinados de mañana. Mientras tanto, sigo sin poder adaptarme al cambio de hora, hoy me levante a las cuatro de la mañana, así que me fui al comedor comunitario a tomarme unos solitarios mates...
Ayer competí por primera vez en un mundial de natación master y, a decir verdad, fue una experiencia maravillosa.
El Challenge Stadium es uno de los complejos deportivos más famosos de Australia. Es un centro deportivo de alto rendimiento, un lugar abierto a la comunidad para realizar deportes y también un espacio donde se disputan diferentes competencias nacionales e internacionales. Sumado a lo anterior, se realizan semanalmente varios espectáculos culturales. Todavía no lo recorrí en su totalidad pero ya vi las 3 piletas de 50 metros para competencias y entrada en calor, la pileta de saltos y nado sincronizado y la pileta donde se están realizando los partidos de waterpolo. Tienen dos minibares, una sala con 6 computadoras con acceso a Internet, un gimnasio para gimnasia deportiva, canchas de fútbol y rugby, etc. etc.
En este Campeonato Mundial se aplican las reglas de la FINA (Federación Internacional de Natacion Amateur) no solo en lo que respecta a los estilos (toques reglamentarios, sin partida en falso, etc) sino también en lo referido al llamado previo a la competencia. Hay que presentarse a una de las mesas de control para lo que se denomina en ingles “marshaling area” , algo así como la zona de organización o prelargada. En determinado momento están los nadadores compitiendo, los de la serie siguiente, sentados detrás del cubo de partida, los de la otra serie sentados en la cabecera opuesta dentro del natatorio y además los de la otra-otra serie sentados en la mencionada “marshaling area”
Debuté con los 800 libres y, si bien no mejoré mi marca por un par de segundos, el puesto 24 en el resultado final me dejó más que satisfecho. Cometí el error táctico de ser demasiado cauteloso en los primeros 300 metros: por evitar forzar el ritmo y tratar de producir poco acido láctico al comienzo de la prueba, el grueso de los competidores se me alejó mucho. Al dar la vuelta en los 300 metros levanté la cabeza y me fijé en el parcial que aparece automáticamente en el tablero electrónico. Cuando me di cuenta que estaba detrás del tiempo que me había fijado levanté el ritmo, pero esto no alcanzó. Paciencia.
Hoy sábado no tengo ninguna prueba, quizás a la tarde vaya a nadar para recuperarme para lo 400 combinados de mañana. Mientras tanto, sigo sin poder adaptarme al cambio de hora, hoy me levante a las cuatro de la mañana, así que me fui al comedor comunitario a tomarme unos solitarios mates...
